En las playas del Pacífico guatemalteco, una nueva generación de tortugas parlama (Lepidochelys olivácea) inició su viaje hacia el mar, dando continuidad al ciclo de vida de esta especie amenazada y esencial para los ecosistemas costeros.
La liberación se realizó el 19 de octubre en la playa de Tecojate, municipio de Nueva Concepción, donde decenas de crías alcanzaron el océano tras completar su proceso de incubación. Cada temporada de anidación representa una oportunidad para fortalecer los esfuerzos de conservación que buscan asegurar el retorno de estas tortugas a las mismas costas donde nacieron.
El ciclo vital de la parlama comienza cuando las hembras anidan y depositan sus huevos en la arena, donde permanecen entre 45 y 65 días antes de eclosionar. Las crías que alcanzan el mar atraviesan una fase juvenil de varios años y, al llegar a la madurez —entre los 9 y 15 años—, regresan a su playa de origen para reproducirse, cerrando un proceso biológico de migración y supervivencia.
La actividad forma parte del trabajo conjunto entre la Wildlife Conservation Society (WCS), la Municipalidad de Nueva Concepción, el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (CONAP), Magdalena, Campo para Crecer y los socios de la Mesa de Mangle, con el apoyo de la comunidad local. Estas acciones integran la protección de nidos, la liberación controlada de neonatos y la educación ambiental como herramientas para conservar los hábitats marinos.
Invitamos a la ciudadanía guatemalteca a participar en los programas de conservación marina y costera, y a reducir su huella ambiental mediante el manejo adecuado de los desechos sólidos.
El equilibrio del mar comienza en tierra.
Texto e imágenes por José Moreira (WCS Guatemala)