Pasamos el día entero recorriendo el río Hondo, solamente nos detenemos en una playa para cocinar el almuerzo para 40 personas. El nombre del río probablemente se deba a un cañón que se encuentra río arriba, puesto que este río no tiene nada de hondo; es más, este río es famoso por tener el nivel del agua muy bajo. A medida que transcurre el día, la frecuencia con la que tenemos que bajarnos de los botes para pasar un sin número de “huarascas” o rápidos se incrementa. Al final del día todos estamos cansados y acampamos en otra playa. El canto de algunas ranas quizás anuncia un cambio de clima.